Cáritas, la organización humanitaria vinculada a la Iglesia católica, ha vuelto a ser objeto de críticas por parte de Vox debido a su trabajo con personas migrantes.
Esta ONG, que atiende anualmente a más de 500,000 inmigrantes y financia aproximadamente el 70% de sus actividades con fondos privados, ha expresado públicamente su apoyo a una regularización extraordinaria de migrantes en España.
El partido de Santiago Abascal rechaza firmemente esta propuesta y ha cuestionado el papel de Cáritas en el debate sobre la migración. Por su parte, desde Cáritas sostienen que su postura está alineada con su misión de ayudar a quienes se encuentran en situaciones vulnerables, sin considerar su estatus legal.
El conflicto surge en un contexto de creciente polarización política respecto a las políticas migratorias y la gestión de los flujos de personas que llegan al país.
