Un exalumno de 21 años llevó a cabo un tiroteo en su antigua escuela en Graz, Austria, resultando en la muerte de diez personas y dejando al menos once heridas, algunas de ellas graves. Posteriormente, el agresor se quitó la vida.
En un principio, se reportaron nueve víctimas mortales, pero una mujer herida falleció después en el hospital, incrementando la cifra a diez, según informaron fuentes médicas locales. Las autoridades mantienen abierta la investigación para esclarecer las razones detrás de este suceso ocurrido en la escuela secundaria del sur del país.
Este acontecimiento ha impactado profundamente a la sociedad austriaca, que ahora enfrenta el dolor y la incertidumbre tras uno de los episodios más graves registrados en su sistema educativo. Equipos de emergencia y personal sanitario continúan atendiendo a los heridos, mientras la comunidad local lamenta las pérdidas y demanda explicaciones.

