El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) enfrenta importantes dificultades en su plan para recuperar terreno en el denominado “cinturón rojo” madrileño. La estrategia, liderada por Óscar López, secretario de Organización y exdirector de Gabinete de Pedro Sánchez, buscaba motivar a los votantes que habitualmente se abstienen y contar con la imagen de sus alcaldes más consolidados para mejorar los resultados en las elecciones municipales de 2027.
No obstante, esta iniciativa política está en riesgo debido a múltiples pesquisas judiciales que involucran a varias administraciones municipales socialistas en la región. Los supuestos casos de corrupción han generado preocupación interna y pueden perjudicar gravemente el objetivo de recuperar la influencia en los tradicionales bastiones de la izquierda en Madrid.
Desde el partido reconocen que «tendremos que asumir las consecuencias», conscientes del desgaste que estos asuntos pueden acarrear de cara a unos comicios decisivos. La inquietud crece entre los socialistas, temiendo que la percepción de corrupción debilite aún más su compleja situación en una comunidad donde el PP mantiene una posición de fortaleza.
