Santiago Abascal, presidente de Vox, ha informado que dejará de acudir a actos institucionales donde no pueda mantener un debate directo con miembros del Ejecutivo. Durante su discurso en la Plaza de Colón, manifestó su rechazo a la participación meramente protocolaria en eventos como el desfile del 12 de octubre o la recepción en el Palacio Real ofrecida por los Reyes.
Abascal argumentó que no es posible simular una normalidad con un Gobierno que considera corrupto. Por ello, justificó su ausencia en el palco de autoridades y en la recepción oficial. Indicó que solo asistirá a eventos que permitan un enfrentamiento abierto con el Gobierno, al que acusa de vulnerar la legalidad y comprometer la unidad del país.
El líder de Vox se presentó como portavoz del compromiso de la juventud con España, destacando el papel activo de las nuevas generaciones en la defensa nacional frente a los ataques separatistas y la supuesta complicidad del Gobierno.
El acto organizado por Vox en ocasión del Día de la Hispanidad congregó a simpatizantes en un ambiente caracterizado por críticas hacia el Ejecutivo y la reivindicación de principios patrióticos.