Se cumple un año desde la escapada del expresidente catalán Carles Puigdemont, un suceso que impactó a los Mossos d’Esquadra y que todavía afecta a la institución policial. La fuga, transmitida casi en tiempo real, generó una división interna que persiste.
En la actualidad, tres agentes siguen siendo investigados por su presunta participación en facilitar la salida de Puigdemont del territorio español. La indagación se centra en esclarecer si dichos efectivos, que integraban el dispositivo de seguridad del exmandatario, actuaron intencionadamente para evadir los controles policiales y judiciales.
El proceso de investigación avanza con lentitud y mantiene cierta incertidumbre en el cuerpo, mientras que las defensas de los implicados defienden que sólo cumplieron con sus funciones profesionales de forma estricta.
