Carlos Caetano Bledorn Verri, conocido como ‘Dunga’ (Ijuí, 1963), figura emblemática del fútbol brasileño y capitán de la selección que ganó el Mundial en 1994, habló tras su inclusión en el Salón de la Fama del Fútbol de Pachuca. Con sencillez y cercanía, el excentrocampista abordó temas que van desde su trabajo social hasta la situación actual de la Canarinha.
Respecto a sus actividades fuera del terreno de juego, Dunga resaltó que participa en iniciativas sociales con discreción. “Prefiero no hablar mucho de ello; lo social debería mantenerse en el anonimato. Aprendí la importancia de la beneficencia durante mi etapa en Italia, cuando visitaba hospitales. Comprendí que el fútbol no sólo consiste en golpear un balón, sino que conlleva una responsabilidad social”, explicó.
El brasileño también reflexionó sobre el papel de los futbolistas como modelos a seguir: “Deben comprometerse más, ya que su influencia en los jóvenes es considerable. No me refiero a aspectos materiales como coches o ropa, sino a valores y conducta. Los niños nos observan y debemos ser un buen ejemplo”.
En relación a Vinicius Junior, Dunga consideró: “Vini es un líder en lo técnico, capaz de crear jugadas y asumir la ofensiva, pero no cumple con un liderazgo dentro del vestuario. Brasil aún necesita un capitán tradicional. Casemiro podría desempeñar ese rol, ya que su presencia es necesaria en la selección”.
Sobre la elección de Carlo Ancelotti como entrenador de la Canarinha, Dunga señaló: “Era oportuno apostar por un director técnico extranjero. El ambiente interno estaba dañado por problemas políticos. Con Carletto, la atención se focaliza en el fútbol, lo que resulta positivo”.
En cuanto a los jóvenes talentos brasileños, Dunga fue claro: “Endrick debe disputar partidos para progresar. La experiencia se adquiere en la práctica, no únicamente en los entrenamientos. Rodrygo también necesita tiempo para acostumbrarse a los ajustes tácticos”.
Por último, el campeón mundial mostró una visión optimista pero realista sobre el Mundial: “Brasil y Argentina siempre son candidatas principales. España, Francia y Argentina tienen ahora un nivel superior, aunque la situación puede cambiar. La confianza de Vinicius es fundamental. En un Mundial, la mentalidad es decisiva”.
