El incremento de la inversión en materia militar por parte del Gobierno de España ha suscitado críticas contundentes desde sectores de izquierda.
Podemos señala que, a partir de 2023, el Ejecutivo ha asignado 17.000 millones de euros adicionales para defensa, una cifra que ya aparece en los informes oficiales de la OTAN.
Esta formación política critica que el Gobierno esté «dando prioridad al desembolso militar sobre las demandas sociales», y alerta de que esta medida supone un cambio notable en las políticas presupuestarias vigentes. El debate surge en un tiempo internacional donde la Alianza Atlántica insta a sus países miembros a incrementar sus capacidades de armamento y alcanzar un gasto mínimo del 2% del PIB en defensa.
Por su parte, el Gobierno argumenta que el aumento del presupuesto responde a compromisos internacionales y a la necesidad de actualizar las Fuerzas Armadas en un contexto global con crecientes tensiones.