El expresidente del Gobierno José María Aznar emitió una advertencia firme durante el proceso de renovación interna del Partido Popular. Antes del congreso del partido, cuestionó la transparencia de ciertos procedimientos políticos, señalando: «Si alguien puede manipular unas elecciones internas en su partido, ¿por qué no alteraría unas elecciones generales?»
El líder que orientó al PP hacia un «centro reformista» hizo un llamado a actuar con cautela y serenidad en un momento decisivo para la formación. «Es necesario mantener la cabeza fría», enfatizó, apuntando que, como consecuencia de los casos de corrupción, el costo de gobernar ha aumentado: «El precio por mantenerse en el Gobierno será mayor y está dispuesto a afrontarse.»
Aznar no identificó a personas ni aludió directamente a la dirección actual del partido, aunque sus declaraciones han generado numerosas interpretaciones dentro y fuera del PP. Su mensaje parece estar dirigido a quienes conducen la transición política y organizativa, en un contexto donde la credibilidad y la regeneración son temas fundamentales.
El congreso del Partido Popular, previsto en los próximos días, será el espacio para redefinir su estrategia y liderazgo de cara al futuro. La intervención de Aznar se suma a otras opiniones críticas que exigen mayor transparencia interna y una revisión exhaustiva tras los escándalos de corrupción que han impactado a la formación en años recientes.