La inversión, coordinada por los Ministerios, se ha utilizado para la renovación y mejora de dos viviendas señoriales en Madrid que forman parte del Patrimonio del Estado. Este importe ha provocado debate por el elevado coste asociado a estas residencias oficiales de los ministros de Transportes e Igualdad.
El Gobierno ha sido objeto de críticas debido al significativo gasto público dedicado a las adecuaciones de las viviendas oficiales asignadas a Óscar Puente (Transportes y Movilidad Sostenible) y Ana Redondo (Igualdad). El presupuesto destinado a ambas propiedades en Madrid ronda o supera el millón de euros.
La polémica no cuestiona el derecho de los ministros a contar con una residencia en la capital —considerando que ambos provienen de Valladolid y necesitan residir en Madrid para desempeñar sus cargos—, sino que se centra en la cuantía destinada a reformas consideradas de «lujo» en los inmuebles.
Estas viviendas pertenecen al Patrimonio del Estado y fueron asignadas a los Ministerios correspondientes tras la designación de Puente y Redondo. Según diversas informaciones, las obras incluyeron renovaciones completas y acondicionamiento de alta calidad, elevando el coste total a más de 1,1 millones de euros según algunos reportes.
Reproches por el gasto excesivo en un contexto económico complejo
El elevado desembolso en estas viviendas señoriales ha sido criticado por la oposición y sectores públicos, especialmente en relación con las constantes exhortaciones del Ejecutivo a mantener la prudencia económica. La elevada inversión en estas residencias ha reavivado el debate sobre la diferencia entre los mensajes de austeridad oficial y el uso de fondos públicos para mejorar el confort de altos cargos.
El Gobierno ha argumentado que estos gastos resultan imprescindibles para garantizar la «habitabilidad y seguridad» de los inmuebles oficiales, aunque el carácter selecto de las reformas ha llamado la atención mediática y política, lo que ha obligado al Ejecutivo a justificar la necesidad de esta inversión considerable.

