El juez titular del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid convoca este domingo a las 17:30 horas a la secretaria general de la Presidencia para que preste declaración como investigada en la causa por presunta malversación relacionada con la esposa del presidente del Gobierno.
El domingo 16 de noviembre se presenta como una fecha decisiva en la investigación que involucra a Begoña Gómez, esposa del presidente del Ejecutivo. El magistrado Juan Carlos Peinado ha citado para las 17:30 horas a Judit Alexandra González Pedraz, última imputada en este procedimiento y secretaria general de la Presidencia.
El imputación de González se produjo bajo la sospecha de presunta malversación de fondos públicos, ya que, en su función como superior de la asesora de Begoña Gómez, podría no haber intervenido ante actividades privadas que deberían haberse mantenido en el ámbito público. La elección de este domingo para su declaración es poco habitual y ha generado atención tanto en medios como en ámbitos políticos.
Además de la declaración de González, el juez Peinado ha convocado para este mismo día a tres testigos relevantes: el exvicerrector de la Universidad Complutense de Madrid, Juan Carlos Doadrio; Diego de Alcázar, presidente del Instituto de Empresa; y Miguel Escassi, director de Relaciones Institucionales y Políticas Públicas de Google España. La concentración de estas testimoniales en una sola jornada destaca la importancia actual de la instrucción.
La investigación abarca la administración de contratos, el empleo de recursos públicos y las conexiones entre instituciones académicas y privadas relacionadas con Begoña Gómez, así como las responsabilidades de su asesora en la administración pública. Según el juez, existen indicios razonables de una posible «malversación por omisión», al no actuar de manera diligente una alta funcionaria pese a tener conocimiento de supuestas irregularidades.
La comparecencia de González este domingo podría suponer un punto de inflexión en el proceso, anticipando decisiones próximas sobre fases procesales, posibles imputaciones o la elevación del caso a un tribunal de jurado. Las defensas sostienen que las investigaciones se basan en hipótesis y que la investigada aún no ha tenido la oportunidad completa de ofrecer su versión de los hechos.
La distribución del día en esta única sesión concentra las declaraciones principales, aumentando la expectación y las implicaciones políticas del procedimiento, dadas las altas responsabilidades públicas involucradas y el impacto institucional que puede conllevar.
