Podemos ha confirmado que presentará una candidatura propia para las elecciones andaluzas previstas en 2026, rompiendo así con la estrategia de unidad promovida por Izquierda Unida y Sumar. Esta decisión ha provocado una división en la formación morada en Andalucía, que este lunes vio la salida de uno de sus principales dirigentes, José Manuel Jurado, quien ocupa la segunda posición en la organización regional y es diputado en el Parlamento autonómico.
Jurado comunicó su dimisión como coportavoz de la Ejecutiva andaluza en señal de protesta ante la negativa de la dirección nacional a pactar con IU y reeditar la coalición de Por Andalucía, coalición que en las elecciones anteriores otorgó a Podemos tres de los cinco escaños con los que cuenta en el Parlamento regional. «No tiene sentido que yo, que he defendido la unidad, sea portavoz de una política diferente», explicó en declaraciones a Público.
Su retirada refleja el descontento interno generado por la postura de Ione Belarra, quien apuesta por mantener la confrontación con Sumar y el PSOE, en línea con la estrategia nacional que busca posicionar a Irene Montero como candidata en las próximas elecciones generales.
El escenario electoral anticipa una fragmentación de la izquierda andaluza en tres candidaturas: IU-Sumar, Adelante Andalucía —liderada por Teresa Rodríguez— y Podemos. Esta división podría dispersar el voto progresista y debilitar su representación frente a un Partido Popular que llega a la cita electoral con mayor fortaleza.
Jurado, vinculado con movimientos por la vivienda, descarta por ahora sumarse a otra lista y ha confirmado que no repetirá candidatura ni ocupará cargos orgánicos en Podemos. «No existen motivos específicos andaluces para rechazar un acuerdo con IU», lamentó, señalando que el tiempo para rectificar esta situación se agota mientras la coalición de Por Andalucía avanza sin contar con la participación de Podemos.