10 de septiembre de 2025
El sistema sanitario en Ceuta enfrenta nuevas dificultades. El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) ha alertado que el servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Ceuta (HUCE) queda reducido a la mitad tras la marcha de uno de los dos profesionales que lo componían.
El médico, que estuvo más de dos años en la ciudad, ha optado por trasladarse a la península en búsqueda de mejores perspectivas profesionales. Según el SMC, esta decisión evidencia la ausencia de incentivos y medidas por parte del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), cuya falta de acción está transformando a Ceuta en un «desierto sanitario».
La situación es preocupante: una única reumatóloga deberá atender a una población superior a 85.000 personas, realizando consultas, pruebas y seguimientos que no se podrán cubrir con los estándares adecuados de calidad y seguridad. El sindicato estima que al menos 17 pacientes diarios dejarán de ser atendidos. Además, la especialista tendrá que encargarse de las densitometrías óseas —necesarias también para Traumatología, Rehabilitación y Oncología— mientras que pruebas como las ecografías músculo-esqueléticas se eliminarán del catálogo de servicios y otras, como las capilaroscopias, quedarán suspendidas por falta de tiempo.
“Un servicio que hasta ahora funcionaba adecuadamente pasará a ser un recurso limitado sin capacidad suficiente para responder”, señalan desde el SMC, que destaca que cada salida de personal sanitario incrementa el vacío y agrava los retrasos existentes desde hace tiempo.
El sindicato atribuye la causa principal a la falta de implementación de incentivos para áreas de difícil cobertura, iniciativas anunciadas en varias ocasiones pero nunca ejecutadas. Mientras que otras comunidades autónomas desarrollan estrategias para mantener y atraer especialistas, en Ceuta los profesionales soportan la carga laboral limitada y carecen de expectativas, lo que les conduce a emigrar.
El SMC insta al INGESA a asumir su responsabilidad y a adoptar medidas urgentes para detener la pérdida de especialistas. “No se trata de un problema exclusivo del sector, sino de garantizar un derecho fundamental para los ciudadanos: el acceso a una atención médica adecuada, efectiva y segura”, recalcan.
Lo ocurrido en el servicio de Reumatología es solo una muestra de la situación precaria que afecta a varios servicios hospitalarios en la ciudad. “Descuidar de esta manera a Ceuta no solo es una gestión deficiente, sino también una omisión de funciones que condena a la población a contar con menos médicos, menos servicios y mayores dificultades”, concluyen.